Nuestra misión
Nuestra visión
San Francisco AIDS Foundation imagina un futuro en el que se logre la justicia sanitaria para todas las personas que viven con el VIH o corren el riesgo de contraerlo. En última instancia, aspiramos a un día en el que: la raza no sea una barrera para la salud y el bienestar; el consumo de sustancias no esté estigmatizado; el estado serológico respecto al VIH no determine la calidad de vida; y se elimine la transmisión del VIH.
Nuestra misión
San Francisco AIDS Foundation promueve la salud, el bienestar y la justicia social para las comunidades más afectadas por el VIH, mediante servicios de salud sexual y consumo de sustancias, defensa y asociaciones comunitarias.
Nuestros valores
Ser la organización que necesitamos para cumplir nuestra misión exige que cada aspecto de nuestro trabajo esté arraigado en estos valores fundamentales.
Justicia: Nos esforzamos por lograr la diversidad, la equidad y la inclusión de las comunidades más afectadas por el VIH en nuestros programas y en todos los niveles de la organización. Nos comprometemos a reconocer, interrumpir y abordar la opresión.
Dignidad: Reconocemos que todas las personas tienen dignidad y tienen derecho a ser respetadas; no se deben juzgar las elecciones de nadie. Trabajamos para desestigmatizar el sexo, la sexualidad, la identidad y expresión de género, el consumo de sustancias y la discapacidad. Creemos en el consentimiento y la autonomía de todos los cuerpos. Animamos a todos a definir sus propias necesidades y tomar sus propias decisiones, y les apoyamos para que adquieran autoeficacia.
Valentía: Somos audaces y valientes en nuestra elección y promoción de ideas nuevas o controvertidas que
hacen avanzar nuestra misión a través de nuestros servicios y programas. No tenemos miedo al fracaso y comprendemos que aprender de nuestra experiencia siempre nos hace más fuertes. Nuestro trabajo es a menudo difícil, pero cuidamos de nosotros mismos y de los demás para poder resistir.
Liderazgo: Hacemos avanzar las mejores prácticas de salud pública y contribuimos a los últimos avances científicos en el campo de la salud pública. Trabajamos incansablemente para cambiar las leyes y políticas que impiden la salud y el bienestar de las personas que viven con el VIH o corren el riesgo de contraerlo. Lideramos con humildad, colaborando y compartiendo ideas tanto para aprender de los demás como para apoyar su crecimiento.
Excelencia: Proporcionamos un apoyo excepcional al personal y servicios de la máxima calidad a los clientes, mediante modelos de servicio integrados, evaluación y mejora continuas de los programas, asociaciones estratégicas sólidas, administración responsable de los recursos y examen y mejora periódicos de la cultura y la capacidad del lugar de trabajo.
Nuestras principales estrategias
Utilizamos tres estrategias básicas que se refuerzan mutuamente para crear el mayor cambio positivo en nuestras comunidades. Nos centramos en:
- Prestación de servicios integrados de salud sexual y consumo de sustancias;
- La defensa, que incluye el trabajo político y de reparación del sistema, la educación pública, la creación de capacidades y la investigación,
- Reforzar y crear asociaciones comunitarias.
A quién servimos
San Francisco AIDS Foundation ofrece servicios, comunidad y espacios para personas de todas las edades, razas, etnias, situación de inmigración, estado serológico respecto al VIH e identidad de género. Nuestras comunidades prioritarias son las personas que viven con el VIH; los hombres homosexuales, bisexuales y queer; las personas transgénero y de género no binario; y las personas que se inyectan drogas. Dentro de estas comunidades, damos prioridad además a las personas de color, las personas sin hogar y con viviendas inestables, las personas mayores de 50 años, las personas con hepatitis C, las personas que consumen sustancias y las personas con necesidades de atención a la salud mental.
Reconocemos que estas comunidades no son mutuamente excluyentes ni esta lista es exhaustiva, ya que hay muchas intersecciones en nuestras identidades y experiencias. Por ejemplo, las personas con discapacidad, los inmigrantes indocumentados y las personas cuya lengua materna no es el inglés se entrecruzan con todas las comunidades prioritarias.